“No esperamos que el nombre le guste a todas las personas. Pero creemos que con que nos guste a nosotros es suficiente y lo que opinan las demás personas no es algo que tomamos en cuenta para la decisión final. Toda la familia lo llamaba Goku desde el embarazo, incluso los amigos comenzaron a regalarles ropa, juguetes y todo tipo de cosas relacionadas al anime”, comento Juan Carlos.
Claro que esta pareja teme por que su hijo sea molestado por otros niños, pero al parecer hicieron una pequeña investigación y descubrieron que niños con nombres de personajes como Luke o Neo eran felices por tener un nombre así: se sentían únicos.
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